Sigo con este intento de experiencia socializante de las arquitecturas que tenemos más cercanas. Hoy os muestro un parvulario que Jon Muniategiandikoetxea Markiegi y Tomás Valenciano Tamayo, viejos colegas del equipo donostiarra de arquitect@s VAUMM proyectaron y dirigieron en Eibar, y que ha sido finalista de los premios del COAVN en esta última edición de 2007.
Aunque, como se puede leer del extracto de la memoria de proyecto, mejor que un «parvulario sobre un aparcamiento«, el proyecto parece que se planteó más bien como un aparcamiento (fundamentalmente) con un parvulario encima. Y para quien no conozca el valle, el sitio, un aviso: el territorio en Eibar es endemoniadamente accidentado, únicamente quedan por ocupar las laderas más escarpadas junto al fondo del valle, y cualquier búsqueda de solares para edificar nuevos edificios obliga a extraordinarios ejercicios de ingeniería civil -contenciones de laderas inestables, cimentaciones especiales, rellenos o desmontes inverosímiles,…- que no son comparables a actuaciones similares en otros emplazamientos más «amables». De hecho, el mayor logro de este proyecto, desde mi punto de vista, es que sus autores han conseguido hacer de necesidad virtud y convertir una limitación inicial (la topografía desfavorable) en un argumento central del proyecto, un valor más en positivo de la obra. Pero mejor que leamos directamente de las fuentes:
EDIFICIO DE GARAJE Y PARVULARIO EN EIBAR
El objeto de este proyecto por tanto, plantea la ocupación de la plataforma-terreno por parte de los garajes (94 plazas, dividido en 2 plantas) y la integración del nuevo parvulario (8 aulas) desde la perspectiva de dar solución al problema de accesibilidad, valorando la correcta orientación de las aulas y patio, y mínimo impacto volumétrico hacia la calle Sansaburu.
Las aulas están pensadas para disfrutar de la luz de la mañana y mediodía, horario de ocupación del parvulario. El interior del edificio se piensa a escala de los niños. La iluminación natural de pasillos y aulas se realiza a través de ventanas situadas a nivel del suelo permitiendo la contemplación del exterior a los mismos. Los acabados interiores se dan en colores cálidos y vivos que dotan al parvulario un cierto carácter lúdico, que trasciende al exterior a través de la disposición aleatoria de los huecos de fachada y mediante la utilización de paneles de colores en el balcón hacia la calle Sansaburu y accesos al edificio. La distribución aleatoria de las luminarias en el frente de malla de fachada funciona a modo de reclamo hacia el edificio.
Arquitectos redactores y directores de obra: Jon Muniategiandikoetxea Markiegi y Tomas Valenciano Tamayo
Es en mi pueblo, y lo ignoraba, lo de esta joya arquitectónica. Si te animas a colocar arquitectura en el mapa, el tag architecture de Tagzania marca lugares bien interesantes. 😉
Luistxo, gracias por la sugerencia. A partir de ahora referenciaré con etiquetas en tagzania todos mis artículos que versen sobre «arqutiecturas cercanas», como este de Eibar.
Por cierto, algo ya había intentado yo enredar con este invento de Tagzania, hace unos días: intenté -no sé si con mucho éxito- «etiquetar» los proyectos de mi empresa, ORUBIDE. En mi dirección de Tagzania los podéis ver, y decirme -los expertos como Luistxo- si lo estoy haciendo bien o hay más potencialidades de Tagzania que estoy desaprovechando por desconocimiento…
enhorabuena por la obra a los autores y gracias a fernando por servir de punto de encuentro.
las imagenes que aportas resultan muy sugerentes en la relación que el proyecto establece entre el mundo infantil y el entorno super complejo en el que se asienta el edificio.
se confirma la máxima de que en las situaciones mas dificiles estan las mejores oportunidades para dejar salir un proyecto interesante.
si fuera posible, se agradecerian alguna planta mas y alguna sección, a parte de que buscaremos una oportunidad para ir a visitarla
lo dicho, zorionak
@iñaki garai: gracias a tí por proporcionarnos la materia prima para poder conocer, debatir y enriquecernos tod@s con vuestras obras.
Por cierto, que hay en un post anterior, sobre el Polideportivo de Bakio, alguna pregunta de tonneti que sería mejor que tú mismo, iñaki, respondieras, si te parece bien, claro. Así evitamos interpretaciones erróneas y conocemos las intenciones de proyecto desde sus fuentes…
Traslado a los autores de este Parvulario tu petición de más material (plantas, secciones) e intento actualizar el artículo con él.
muy buena obra… llena de desniveles, original y moderna…
Sí, valeria, lo de los desniveles es algo que, en Eibar, o asumes o no construyes…
Gracias Fernando por haberme permitido descubrir este proyecto interesantísimo. No conocía a los autores ni tenía referencias sobre esta obra, ha sido un gra descubrimiento.