No me digan que esta belleza de talla -minúscula de tamaño, es verdad, pero muy grande en expresividad- no parece más del siglo XX, concretamente de Fernando Botero, que de su procedencia real, de entre el siglo XXX al XXXIII, pero antes de cristo. Mide sólo 12 centímetros, y es de arcilla roja, y la encontraron en el Hipogeo de Hal Saflieni, uno de los templos megalíticos excavados más antiguos de la tierra. Ahora descansa, recostada en su lecho ocre de arcilla, en el Museo Arqueológico Nacional de Malta, en Valletta, donde la fotografié en diciembre de 2012.
arkimia 