En el blog de Emili Manrique he visto una especie de «top-ten» de la arquitectura emergente española, esto es, la hecha por menores de 40 años. (¿…esto significa que los mayores de 40 años somos sumergentes, sumergidos, enterrados,…? 😉 realizada por la revista New Italian Blood. La lista, como todas, como aquella que hace ya casi un año os presenté con el que yo consideraba posible top-ten de la arquitectura internacional contemporánea, es totalmente discutible, y como dice Emili, está bastante limitada geográficamente. Pero no viene mal darse una vueltita por las webs de estos diez equipos de jóvenes arquitect@s. Los equipos son, en el mismo orden que las imágenes que enlazo a su web: Ecosistema Urbano, FAM arquitectura, GPY arquitectos, BB arquitectes, Andrés Jaque, Carlos Arroyo, re-d, MAB architettura, Fonda Rius y Barrozzi y Veiga: (las imágenes proceden de las webs de cada uno de estos equipos de arquitect@s)
arkimia 
Sera porque todavia estoy estudiando, pero a mi me sorprende que en arquitectura, joven signifique menor de 40… no digo que una persona de menos de 40 no sea joven, pero cuando normalmente ves «emprendedores» en la tele o revistas, suelen ser de 20 o 30 años a lo sumo, pero en lo nuestro, parece que todo va mas lento…
http://www.flickr.com/photos/10238282@N02/?saved=1
juasjuas yo tambien!!!
@hansbrinker, todo es del color del cristal con que se mira: cuando pasas de la cuarentena cualquier cosa te parece juventud; y cuando ni llegas a la treintena -felices vosotr@s- la vejez es todo lo demás. Pero fíjate en que en una profesión como la nuestra, donde es difícil estar con la carrera terminada y en ejercicio profesional antes de los 30, limitar «por decreto» la definición de jóvenes arquitect@s a los 40 tampoco es ninguna burrada. Vamos, digo yo, que lo veo al otro lado de esa barrera psicológica, justito, pero recién pasada. Por cierto, zorionak, Tomás, y bienvenido al club de los ya-no-jóvenes-arquitect@s. Se siente…
@Virginia, muy chulas tus fotos. Mola el invento-Flickr para compartir las fotos, ¿verdad?