Ya ha llegado el verano: hoy ha empezado el Jazzaldia en Gasteiz, señal inequívoca de que el estío [por fin] ha llegado a Euskadi. El festival ha comenzado con una sesión de jazz del que más me gusta, de sonido básico New Orleans, con un cuarteto, el de Wendell Brunious and the New Orleans Stompers, en las campas de Armentia de Gasteiz, y el grupo del clarinetista Evan Christopher, el de la foto. Buen rollito, pic-nic campero ideal para una tarde de domingo estival.
La edición de este año tiene como estrella más comercial a Norah Jones, que toca el sábado en Mendizorrotza. Yo creo que me voy a decantar por algo más clásico y «pureta«, el concierto que el viernes protagonizarán Ornette Coleman y el quinteto de Dave Holland. No porque Norah Jones no me guste, sino porque para cuando me he decidido a pillar las entradas las de la estrella ya estaban agotadas. Y porque aunque me parece que su música es agradable y sincopada, se me antoja pelín demasiado comercial para mi gusto, música-de-sala-de-espera-del-dentista, demasiado melosa y a veces hasta empalagosa, o como decía el viejo colega Salva, demasiado filete (como no alcanzo a las uvas, como el zorro, diré que estaban verdes…;-)
(La foto, calentita, recién sacada esta tarde en las campas de Armentia durante la actuación de Evan Christopher’s Clarinet Road)